El dulce tren de la vida (Cañero)

Que será lo que allá viene, en un día de calor, es un trencito cañero, trabajando con ardor

Carta de despedida a mi madre GLADYS LLANOS DE SANCLEMENTE

 

Querida vieja:

Estos últimos días han sido para mi de gran reflexión al rememorar tu vida y tratar de recomponer tus pensamientos en la educación que me diste. No es fácil como hijo, ver a quien te dio la vida ir extinguiéndose lentamente como una vela en un corto pabilo. Esa pequeña llama azul redonda que ahora mantiene tu mirada vacía, fue alguna vez una llamarada ardiente y pasional que creyó firmemente en el determinismo racional como gobierno auto regulador de la voluntad humana. Es por eso que al verte me veo y en tus ojos veo el futuro de todos a su encuentro con la muerte.

Pero no es un mirar triste. Al contrario. Regocijo en la vida que tuviste y no en vano he de imaginar como tu mente se ausentó al final conociendo íntimamente tu alma y tu conocimiento de las pasiones humanas. Siempre fuiste luz y guía, no solo de mi de mi padre y de mi hermano; si no de muchas personas que encontraron en tu incondicional escucha el sosiego para resistir en el cotidiano transitar que siempre dedujiste como vida.

Hoy mirando hacia atrás, y de alguna manera recogiendo el significado de tu vida, no solo como dadora de vida para mi y mi hermano, como abuela para Matías y Maia, si no como compañera de vida de Mauro, mi padre. Ser madre, para mi es principio de vida, para ti parte fundamental de la tuya y para Mauro, el complemente de quien en sus ojos era la persona con la que decidió conformar una familia. Hoy, ya adulto, reconozco el valor de todas esas decisiones. Reconozco en ellas el valor de tomarlas y acatarlas. Pero sin embargo, admiro la entereza con la que defendiste tu individualidad y libertad para vivir.

Fue desde siempre, ya que puedo decir que te conozco de toda la vida, libre y sibarita. Nihilista comprometida con tus creencia y luchadora por domesticar racionalmente tus afectos. Siempre te atrajo la naturaleza humana y sus vericuetos. Desde tus estudios médicos quisiste conocer la mente humana y con el tiempo decidiste que son los pensamientos quienes comandan la partida de las emociones, sin desconocer su instinto y profundidad inconsciente. Encontraste guía en Arcila y te condujo a Freud, quienes fueron tus maestros y consejeros en la desdeñosa tarea de comprender la complejidad emocional de la mente humana.

Transitaste por el conocimiento, y a pesar de no escribir sobre lo que veías, los trazo de tu entendimiento están en las huellas que dejaste en todos los que te conocieron. Tus amigos te aman y extrañan, y en silencio anhelan el re confortable oído que prestabas. He sido testigo durante estos años de tu enfermedad, que como en casa de herrero azadón de palo; llevaron a que al final escaparas del dolor emocional de la vejez y la muerte. Ausente en voluntad, presente en cuerpo cruel y real, hoy somos mi viejo, Edna y yo, con ayuda de varias personas que en su momento y a sus estilo nos brindan la mano para superar la adversidad del diario vivir.

Y sin embargo, al mirar lo duro del presente, reconozco lo fuerte que me has hecho. En esa moral sin sanción ni obligación; en esa ética Spinoziana que atravesó mi educación familiar te rememoro y agradezco. La fortaleza de hoy se la debo a tu ayuda a cargar con el dolor genético y cultural de sufrimiento que en la familia estamos acostumbrados a cargar. Se lo que duele comprender las acciones humanas y lo que el libre albedrío nos pone al frente como acciones libres. Se también que el acto de amor es la generosidad mas pura y consiente de amor propio. Se también que la vida se disfruta, y como Diógenes y epicúreo son los placeres quien guían el camino emocional mientras lidiamos con la fuerza auto destructiva del Tanatos. Pero discernir es tu enseñanza, y sin duda hoy me veo como hombre libre y consiente, preso del sentir pero libre de determinar las acciones de mi trascender. Y eso madre, eres tu viva, en mi.

Por eso traigo a viva voz tu tantas veces renombrado brindis: “por la vida, que es clara, undivaga y abierta como el mar” ; “las algas marineras y los peces testigos son de que escribí en la arena tu bien amado nombre muchas veces”. Por que es un leitmotiv que guió tu vida y por ende la mía. El recuerdo del brindis que imploraba el disfrutar del momento, y de valorar lo que se tiene y lo que se es; Que también decías: “ lo que di, lo tengo; lo que gaste, lo tuve; lo que guarde, lo perdí”

Ahora al rememorar tus gestos, tus acciones, amores y desamores. Reconstruyo y dignifico tu ejemplo al ser en ti, espejo de lo que eres. Si bien, crecer es reconocerte como individuo, madurar es aceptar tu carácter, es ahora, al ocaso de tu vida; cuando veo lo que me dejaste. Mi pasión por entender es tuya. La afinidad para escuchar al otro y quizá reconfortarlo también. Seguramente la franqueza cínica era algo que no conocí como tu hijo, a pesar de que sentí mil veces que tus emociones apaciguaban mi volatilidad y con el tiempo, eventualmente me convertí en muestra viva del autoconocimiento y de que el pensamiento era la cura para el dolor.

Hoy te veo partir poco a poco, hasta el final exigiendo ser el centro de la familia, trono que quise derrocar de adolescente al buscar en Wittgenstein aliados para usurpar el trono del inconsciente. Pero que equivocado estaba. Los limites del lenguaje eran tan solo la orilla del conocer del cual me hablaste desde niño. Puedo hoy mirar atrás y comprender la dureza de tus acciones para controlar el indómito talante juvenil de tu primogénito. Veo también la alianza de amistad plausible que hiciste con mi hermano y las exigencias de participación que abogabas de mi padre. Ahora, cuando estas a la puerta de cumplir tus bodas de oro, veo el triunfo de la diferencia como cohesión en la pareja. Ustedes mantuvieron fielmente su esencia hasta el final, y aunque viene con grandes perdidas y vacíos, reconozco el triunfo espiritual que han logrado.

Tristes, viendo la crueldad de lo real; te hemos acompañado en esta lenta y dolorosa partida. Mauro ha estado a tu lado, ya cansado pero sin desfallecer, a cuidado de ti por mas de 50 años. Lo hace cada día, cada noche. Lo hizo en cada sacrificio de su propio ser para que florecieras y volaras en esporas por el mundo. Que ejemplo de lo que es amar en libertad. He aprendido de ambos la entrega incondicional que significa amar. Y entiendo que el único sentido de la vida es dar. La generosidad de tu lenguaje, de las acciones del viejo, del pragmatismo de Juan; me han hecho desbordarme en creatividad.

Y ahora desde el arte, prometo madre dejar una huella de lo que buscaste, y será mi tarea personal en lo que me queda, enseñarle a la maquina la ética, que como recurso es tan escaso y espero poder hablar pronto con tus pensamientos trascendiendo el conocimiento cognitivo neuronal a un soporte computacional en donde quizá mas pronto de lo que creamos, serás ideas, palabras y discursos. Te prometo madre mía que lo que soy, quedara escrito y creado, para que siga siendo norte en la familia, y que quizá en un tiempo tus nietos; entiendan tu capacidad de conocer nuestras emociones, para así caminar mas tranquilos en el día a día que es la vida.

Gracias, y espero que en tu mente retumben las palabras que me compartiste en secreto hace años, y que permitas que tu transito fuera del cuerpo sea en paz. Acá seguiré cuidando al viejo, a tu hijo y nietos, a Edna quien te dio tanto en estos años; y sin duda a mí. Pues fue esto tu mayor regalo. Te amo

 

About
Piloto, arquitecto, artista y creador audiovisual. Con 20 años de experiencia en la producción audiovisual en diversos trabajos en el Cine, Tele-Novelas, Documentales o Comerciales, a explorado los límites de habitar las imágenes. A través de esta búsqueda ha trabajado en espacios virtuales y en la construcción y diseño de arquitectura efímera. Además de estudios en estética es graduado de la Maestría en artes plásticas y visuales de la Universidad Nacional, en donde ha empezado a explorar la producción artística por medio de explorar el espacio como materia plástica, así como los rasgos de cielo y de lo celesteque evoca su pasado como piloto comercial. Amplios conocimientos en diseño, y líder de sus equipos de trabajo. Actualmente esta trabajando en un proyecto doctoral, que investiga la manera de crear un sustento ético basado en algoritmos; que permitan a la IA (Inteligencia artificial), explorar el arte y la creación como límite de la experiencia humana.
Comments
  • Patricia

    Fui alumna y amiga de tu madre cuando era estudiante. Vivo en USA y la estaba buscando porque la necesitaba. Me encontré con este homenaje. Gracias por tus palabras en este escrito. Con lagrimas en los ojos, recibo un poco de ella a través de ti, Un pequeño alivio imaginando que me diría en estos momentos. Gran Mujer!..gran sonrisa…gran maestra.!